Las recetas neoliberales aplicadas a la economía de nuestro país son conocidas. A la entrega de los bienes patrimoniales nacionales sobreviene de manera exponencial la desocupación, la falta de cumplimiento con los servicios públicos, la pobreza, el hambre. “¿En Catriel hay hambre?, sí; en Catriel hay hambre, asistimos a 300 personas en los comedores que sostenemos con fondos propios, y sabemos que puede empeorar” esas fueron algunas de las palabras que mencionó la IntendentaSalzotto a la multitudinaria concurrencia que se dio cita hoy por la tarde en el centro de la ciudad. La resistencia social y política se plantean como una posibilidad de freno a las negociaciones no consensuadas con los verdaderos interesados en ver los resultados: toda la comunidad toda de Catriel.

La ley Nº 4818 sienta las Bases y Condiciones para la Renegociación de Concesiones Hidrocarburíferas y también establece el destino de los fondos provenientes de la renegociación, un dato nada menor si se considera que en la agilidad aparente a un nuevo acuerdo, para que la provincia tenga un sustento económico con el fin de hacer frente a las obligaciones de la gestión, estaría llevándose la negociación sin dar cumplimiento a lo establecido por la ley, es decir, Catriel no está siendo tenida en cuenta, ya que la Intendenta no está convocada a esa mesa en la se dictaminará un fallotan importante como es el que decide el futuro que les espera a los catrielenseses.
El proyecto, que fue presentado a mediados de abril en la Legislatura Provincial por el Partido Justicialista, plantea con argumentos válidos la transferencia de las áreas de Señal Picada y Punta Barda por el término de 99 años para que sea municipalizada. La intendenta resaltaba a los presentes en su discurso las gestiones que vienen realizando: (…) Presentamos un proyecto amplio, sólido, no nos subestimen, no somos improvisados (…) el proyecto de municipalización de las áreas, también incluye los venteos, la remediación ambiental. Si no nos dan participación, nos vamos a ir a Viedma, iremos a las áreas hasta que nos permitan sentarnos en la mesa de discusión y nosescuchen (…) estamos empoderados, somos el punto de acceso a la región de Vaca Muerta, y nuestra ruta se rompe por el los vehículos pesados que la transitan,(…)nosotros tenemos que ir al valle, a centros de mayor complejidad médica o por trámites que no podemos hacer acá y padecemos la ruta (…) Catriel hoy dice basta, queremos ser parte de la negociación, queremos ese porcentaje histórico, queremos conocer qué planes tienen (…) porque nos van a seguir contaminado, nos van a seguir explotando, exigimos la audiencia pública, la consulta previa (…)”


La Patagonia sabe de resistencia y el antecedente más cercano se realizó en la década del 90 en la provincia de Neuquén, en las localidades de Plaza Huincul y Cutral Có, y la maniobra de los trabajadores desocupados y del municipio lograron con el tiempo que el yacimiento El Mangrullo sea la única área hidrocarburífera del país cuyas regalías no van a una provincia sino a un ente intermunicipal: Cutral Có y Plaza Huincul. En diálogo con Daniela Salzotto en horas de la mañana, Ramón Rioseco, actual intendente de Cutral Có, le manifestó el cambio conveniente que se ha ido produciendo en su comarca, el impulso e industrialización en beneficio de sus habitantes a partir de la posesión municipal el área petrolera.
A las palabras de Daniela Salzotto le sucedieron las del Presidente del Concejo Legislativo, Alberto Ariaudo, que planteó que el argumento de lo expresado en el Proyecto de Ley, que ya fue elevado, contempla porcentajes y una serie de instancias que favorecen a Catriel ,“(…) un plan detallado, desde la A a la Z, siendo la Z la movilización de todo el pueblo(…)”. Además se sumó a los discursos un joven legislador provincial, pero con mucha trayectoria política y militancia social: José Luis Berros, que no dudó en viajar hoy por la tarde para acompañar a Daniela y al Pueblo de Catriel en esta demanda, tan necesaria de fortalecerse con el apoyo de todos los sectores. Berros se comprometió en sostener las peticiones de Catriel ante la Legislatura Provincial e instó a llevar adelante el proyecto de manera conjunta, movilizando a más personas.


Los aplausos a los oradores culminaron cuando comenzó la caminata conformando la marcha que mostraba consignas escritas en papeles y carteles. Se escuchaban algunos cánticos, aplausos y el gentío fue constituyéndose en una gran multitud que completaba casi dos cuadras de extensión.
No fue un acto partidario. Los participantes se acercaron por la difusión en las redes sociales y en los diferentes medios radiales, pero sí fue un acto político.Político, por la toma de decisiones de una mujer que lleva adelante una gestión municipal y se empeña en encontrar respuestas, para devolverles a los ciudadanos la confianza que en ella depositaron. Un acto político, porque la identificación de una problemática social a futuro y la intervención del Estado Municipal en los desafíos socioeconómicos, que repercutan de manera positiva en políticas públicas, siempre dará cuenta de quien toma esa responsabilidad. `Catriel: Ciudad en Alerta´, sus habitantes también y unidos con un solo objetivo, el bien común.
Subsecretaría de Comunicación y Prensa.